* Moción debatida y aprobada en el 78° Congreso de la F.A.(f), Amiens, junio 2019.

Las cifras de actos antisemitas cometidos en Francia en 2018 y reveladas por el Ministerio del Interior son asombrosas. En un año, los actos registrados aumentaron de 311 (en 2017) a 541, un salto del 74%. Sin embargo, para nosotr@s l@s anarquistas, esto no es un "resurgimiento del antisemitismo", porque siempre ha estado presente a lo largo de la historia y se ha extendido exponencialmente hoy especialmente en las redes sociales.

El antisemitismo, dirigido contra los judíos, o que se supone que es así, como grupo religioso, étnico o racial, no es un patrimonio exclusivo de una extrema derecha o una derecha "tradicional" o "nacionalista". Reaparece más fuerte con cada tensión de identidad.

En todo momento, se han utilizado muchos pretextos para justificar el antisemitismo. Pero el antisemitismo, como una de las formas políticas del racismo, culminó en la conferencia nazi de Wansee (1942) para definir las modalidades administrativas, técnicas y económicas de la "solución final de la cuestión judía ". El antisemitismo también ha apuntado a los judíos a través de las purgas estalinistas, como en el "complot de batas blancas" [Moscú, 1953].

Después de la Segunda Guerra Mundial y el exterminio de los judíos, la mayoría de los activistas judíos habían desaparecido, se produjo un silencio consecuente sobre el Holocausto, incluso en las filas de los anarquistas militantes. ¿Fue porque el Holocausto nos cuestionaba profundamente como seres humanos?

Aún así, no solo la extrema derecha, sino también elementos de la extrema izquierda han comenzado a desarrollar declaraciones y posiciones revisionistas o negaciones sobre la existencia de la masacre de judíos . Esto aunque actualmente los historiadores aceptan que entre 5,5 y 6,5 millones de ellos desaparecieron durante este genocidio. El antisionismo es otra cuestión muy distinta; por lo tanto, es importante movilizar nuestras fuerzas para combatir todos los comentarios o actos antisemitas y disociarlos del antisionismo. La ignorancia de esos hechos alimenta el negacionismo y el revisionismo.

Los anarquistas no tratan el nacionalismo del Estado de Israel diferente que cualquier otro nacionalismo. El Estado de Israel es para nosotros un estado entre muchos otros, que hoy desarrolla una política de represión racista, colonialista y religiosa.

Seguiremos apoyando a los Anarquistas Contra el Muro en Israel, así como a los objetores israelíes, y apoyamos la lucha de la población palestina oprimida porque está directamente ligada a nuestro corazón libertario.

Porque somos conscientes de que la creación del Estado israelí confirma la tesis anarquista de que la creación de un estado solo se puede hacer con violencia. Pero también somos conscientes de que decirse antiimperialista no es suficiente para protegerse contra el antisemitismo.

Además, como anarquistas contra todas las formas de discriminación y opresión, continuaremos luchando contra el antisemitismo y contra todas las expresiones del terrorismo, especialmente el que se dirige contra migrantes, refugiad@s y exiliad@s, lucha en la que estaremos activamente en la calle pero también fortaleciendo nuestros medios de difusión (el periódico Le Monde libertaire, la radio Libertaire, la editorial Éditions du Monde liber­taire, folletos, conferencias, cursos de formación, etc.) y la investigación histórica. El racismo y el antisemitismo son armas de quienes buscan dividir y dominar. Lucharemos contra ellos sin descanso.

[Publicado originalmente en francés en el periódico Le Monde libertaire # 1808, París, julio-agosto 2019. Traducido por la Redacción de El Libertario.]