Nota de Briega: Difundimos los siguientes comunicados del sindicato Solidaires21, con la esperanza de que llegue a ser leído por las numerosas personas hispanoparlantes que, sabemos, acuden cada año a la región francesa de Borgoña para trabajar en las vendimias. El texto original en francés se puede encontraraquí.
Nuevo comunicado de Solidaires 21: ¡Vendimias 2023, la cosecha no mejora!

Hoy, nuestra organización sindical ha vuelto a reunirse con decenas de vendimiadores temporeros para hablar de las pésimas condiciones de acogida y alojamiento para la temporada de vendimia 2023. Durante estas discusiones, hemos constatado que la situación no está mejorando, sino todo lo contrario, a pesar de los numerosos intercambios con los patrones. De hecho, a estas alturas, la prefectura se mantiene firme en su decisión unilateral.

También hemos hablado con muchos temporeros no francófonos, para quienes la situación es aún más difícil, porque les cuesta entender esta situación totalmente absurda e indigna. Afortunadamente, existe un fuerte sentimiento de solidaridad entre los temporeros, que traducen las conversaciones y se apoyan mutuamente.

Nuestra organización sindical está de acuerdo con las declaraciones de Thiébault Huber, Presidente de la CAVB, en una entrevista concedida esta mañana a France Bleu Bourgogne. En ella, deplora “las condiciones de alojamiento muy, muy precarias, que rozan lo inhumano”, y pide “a los poderes públicos que hagan algo rápidamente”. Su entrevista confirma lo que hemos sabido por varias fuentes, a saber, que muchos patrones también están muy disgustados por la decisión prefectoral de prohibir por la fuerza las acampadas de temporeros, lo que está creando más problemas que soluciones.

También hemos sabido que los vendimiadores llevan varios días pidiendo soluciones a los ayuntamientos, pero que éstos dicen que no pueden hacer nada y que no ha habido una verdadera concertación previa entre todas las partes implicadas. Durante estas conversaciones, los temporeros confirmaron que los gendarmes habían cerrado el acceso a ciertos bosques y estadios para impedir las acampadas “ilegales”. Aunque esto es patético e indigno, de momento (y afortunadamente) no se ha multado a nadie.

Preferimos evitar hablar del “pueblo de vendimiadores”, que no es más que un ejercicio de comunicación, totalmente fallido, por otro lado. Mientras que, como dijimos hace dos días, es urgente actuar, mientras que el presidente de la CAVB dice lo mismo, mientras que la situación es insoportable para los temporeros cuyas condiciones de trabajo son ya suficiente penosas, ¡el silencio de la prefectura es asombroso!

Nuestra organización invita a los temporeros a intercambiar sus opiniones y puntos de vista y a construir la solidaridad allí donde sea posible, tanto dentro como fuera de los campos, para cambiar la situación. Estamos y estaremos a su lado si lo consideran necesario.

Nuestro sindicato exige a la prefectura que conceda una derogación inmediata para resolver la situación de desamparo de varios miles de temporeros de la Côte d’Or, y que abra un debate entre los patrones, las autoridades públicas y las organizaciones de trabajadores. Lo que está ocurriendo es un auténtico escándalo. Por último, esperamos que los patrones de la Côte d’Or apoyen a sus empleados en su lucha por un alojamiento digno y que se planteen colectivamente aumentar los salarios y pagar a los temporeros en condiciones desastrosas un sueldo decente.

Si la situación no mejora rápidamente, ¡la temporada de vendimia de 2023 no estará exenta de consecuencias!

¡Solidaridad!

Vendimias 2023: una cosecha desastrosa para los temporeros

La vendimia comenzó la semana pasada en la Côte-d’Or, y desde entonces se está produciendo una situación alucinante y escandalosa en los viñedos de Borgoña. La vendimia es una parte esencial de la campaña vitícola, ya que sin ella no se podría embotellar ningún vino. Sin embargo, no se hace nada para acoger dignamente a los temporeros que van a realizar esta tarea. De hecho, ocurre todo lo contrario.

Pagados con el salario mínimo, alimentados a capricho de sus empleadores, alojados como pueden, los vendimiadores, a veces venidos de lejos, recogen en condiciones penosas la fruta que genera millones de euros de volumen de negocios para la industria vitivinícola.

Un año más, en un momento en que las bodegas se quejan de las dificultades para encontrar vendimiadores, la prefectura ha promulgado un decreto que prohíbe a los temporeros acampar, a pesar de la autorización de los propietarios o los alcaldes locales. La orden de la prefectura prevé el uso de drones para hacerla cumplir. Como la prefectura no se detuvo ahí, envió a los gendarmes a perseguir a los acampados. Nuestro sindicato estaba preocupado por las consecuencias de este decreto, pero ahora podemos decir que se trata de una auténtica caza de temporeros en los viñedos de Borgoña.

La prefectura exige a los temporeros que se alojen en un “pueblo de vendimiadores”, por la módica suma de 8 euros por noche, bajo la vigilancia de un guardia de seguridad. La Confédération des Appellations et des Vignerons de Bourgogne, los Organismes de Défense et de Gestion, la Préfecture de Côte-d’Or y los ayuntamientos de Gevrey-Chambertin, Morey-Saint-Denis, Chambolle-Musigny y Ferme de la Buère firmaron un acuerdo para instalar este campamento el 5 de septiembre, cuando la vendimia ya había comenzado.

Con el pretexto de “condiciones que atentan cruelmente contra la dignidad humana”, y en un contexto de crisis y subida de precios, se pide a los temporeros que pidan a sus empleadores que paguen esta carga suplementaria. Son libres de aceptar o rechazar. Si se niegan, los costes correrán a cargo de los temporeros, si tienen la suerte de conseguir una plaza en este “pueblo de vendimiadores”, donde sólo hay 60 plazas, lo que es claramente insuficiente. La noche de su inauguración, el lunes 11 de septiembre, el “pueblo de los vendimiadores” ya estaba lleno, y muchos vendimiadores no tenían dónde alojarse.

¿Cuáles son las opciones? La mayoría de las fincas de la Côte tienen un alto volumen de negocio. Sin embargo, esto no siempre es suficiente para motivarles a rascarse el bolsillo. ¿Y cuál es la solución para los que no tienen plaza en el camping? Represión policial y financiera, acoso de los gendarmes y multas. Ante esta situación crítica, nuestro sindicato pide a la prefectura que deje inmediatamente de precarizar aún más a los temporeros.

Nuestra organización también pide a las empresas que se comprometan colectiva e inmediatamente a proporcionar instalaciones de acogida decentes y a ser solidarias con sus trabajadores. Por último, dada la crisis social y económica que atravesamos, es hora de que los empresarios den un paso al frente y ofrezcan a sus empleados unas condiciones de trabajo dignas.
¡Urge actuar!

PD:
A raíz de este comunicado de prensa, nuestro sindicato se ha reunido hoy con numerosos temporeros durante la pausa del almuerzo. Estamos haciendo un llamamiento a que nos hagáis llegar vuestros testimonios en nuestras redes sociales para obtener toda la información posible sobre la situación actual.

El mensaje en nuestras redes sociales es el siguiente: “Si te enfrentas a esta situación insoportable, ponte en contacto con nosotros dejándonos tus datos de contacto: contact ARROBA solidaires21.org “.

Estas reuniones también nos han permitido saber que el “camping” que se abrió ayer estaba completamente desbordado, lo cual es lógico dado el número tan reducido de plazas en comparación con el número de temporeros de Borgoña.

Fuente:Briega.org