1 | 2
1 | 2
1 | 2
Mayell Hernández un asesinato que se pudo evitar.
Crónica de una muerte anunciada
El asesinato de la bailarina venezolano Mayell Hernández Naranjo a manos de su ex-pareja Willian Enrique Infante Borges, solo viene a confirmar que Venezuela -así como en la mayoría de los países de América Latina- el machismo se profundizó y echo raíces bajo el silencio y la impunidad de todos los actores que son parte del Estado, así como de la mirada indiferente de los partidos políticos llamados opositores.
El asesinato de Mayell Hernández deja al descubierto una red de trato de favores para con el asesino Willian Enrique Infante Borges, hoy en libertad por presuntamente ser funcionario del Ministerio de Finanzas. Lo cual evidencia una política no escrita dentro del seno de la revolución chavomadurista “entre camaradas no nos pisamos la cola”, no se puede hacer críticas, ni denunciar porque como muchas veces oí decir “denunciar a un camarada es hacerle el juego a la derecha”.
De aquellos polvos estos lodos.
La protección y la garantías al asesino de Mayell chocan con la poca protección que ella recibió. Mayell había denunciado y solicitado protección en reiteradas ocasiones. Todos los mecanismos fallaron. Mayell fue asesinada a cuchilladas y estrangulada, el asesino Willian Infante lo hizo de noche, cuando Mayell dormía, en un acto de extrema cobardía.
Mayell Hernández era una mujer concienciada que participaba en los campamentos de ocupación de terrenos llamado “Negra Hipolita”, Bailarina y madre soltera, sabia lo importante de movilizarse para exigir derechos tan básicos como una vivienda digna para ella y los suyos. Fue una mujer que denuncio los maltratos, fue una mujer que confió en las instituciones y las instituciones le fallaron. Y hoy sus familiares y amigos ven con horror e impotencia como el principal sospecho de su asesinato se encuentra en libertad.
Visibilizar a cada mujer.
La joven asesinada no puede quedar como un número más, y mucho menos como una muerte más dentro los índices de asesinatos por violencia social, que, lamentablemente se han “normalizado” en Venezuela. Y no debe quedar como un número porque es nuestra obligación como mujeres el de devolverle la humanidad y la dignidad arrebatada por el asesino machista. Como mujeres tenemos el deber de contar su historia, sus sueños, sus logros, sus luchas. Se preguntarán por qué y es una respuesta que sabemos las sobrevivientes del terrorismo machista : Una de las herramientas más usadas por el machismo es el desprestigio de la mujer para luego, justificar la violencia y, en casos extremos, los asesinatos El machista busca desprestigiar e invisibilizar a la mujer. Nuestra obligación es dignificarla, visibilizarla y darle voz.
Queremos justicia para Mayell Hernández y esa justicia no vendrá como un regalo, pedimos justicia por ella y por todas las mujeres asesinadas que han sido invisibilizadas por el gobierno, las mujeres no tenemos ni si quiera un lugar para revisar el número de feminicidios en Venezuela porque el gobierno no suministra cifras. Y debemos pedir justicia por Mayell porque debe existir una reforma en los protocolos de protección a las mujeres que sufren violencia machista. La muerte de Mayell se pudo evitar porque ella denunció, ella solicitó medidas de protección y todos los protocolos fallaron.
Movilización activa por Mayell Hernández !
Movilización activa para decir basta al terrorismo machista.